En la sociedad estamos sujetos a frustraciones, provocadas por situaciones que la vida nos depara y en las grandes ciudades por el estrés. Hemos aprendido por imitación a autocontrolar las emociones desde la tristeza y la seriedad que genera aislamiento, incomunicación y tensión interna. Para sobrellevarlas el sentido del humor permite relajarse, abre las barreras sociales y es un buen extintor de incendios que genera placer y disfrute.
" La seriedad es contagiosa y la risa tambien"
QUE PASARIA SI CADA UNO DE NOSOTROS DESDE SU ENTORNO COTIDIANO SE ATREVIESE A MOSTRAR EMOCIONES , ACTITUDES, CONDUCTAS O ESTADOS DE ANIMO MAS AGRADABLES Y DE APERTURA HACIA LOS DEMAS... PEQUEÑOS CAMBIOS INDIVIDUALES QUE CONTAGIEN EN LOS DEMAS OTROS ESTADOS DE ANIMO MAS AGRADABLES Y ROMPER LOS DE SERIEDAD Y CERRAMIENTO...
TAN LO HABITUALES Y POR ELLO NORMALIZADOS SOCIALMENTE.
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