Cuántas veces una palabra fuera de lugar es capaz de arruinar algo por lo que hemos luchado, cuántas veces una palabra de aliento tiene el poder de regenerarnos y darnos paz.
Las palabras insultantes o despectivas nunca han creado algo edificante. Con el uso de expresiones agresivas, lastimamos a las personas provocando heridas creando resentimientos y dolor , que se volverán a nosotros,…
La verdad puede compararse con una piedra preciosa. Si la lanzamos contra el rostro de alguien, puede herir, pero si la envolvemos en un delicado papel y la ofrecemos con ternura ciertamente será aceptada con agrado.
Las palabras son la manifestación de nuestro mundo interior, al cuidar de nuestro lenguaje purificamos nuestro mundo interior.
Muchas enfermedades son únicamente el producto de nuestros pensamientos desequilibrados. La violencia, las mentiras, el resentimiento y tantas otras cosas existen y conviven con nosotros en este mundo
Ante ello tenemos que cultivar cualidades de amor, verdad y gratitud, creando un sólido mundo interior en donde la bondad y la verdad brillen; para luego extender este mundo interior a las personas de nuestro alrededor.
Tu palabra irresponsable: puede encender discordias.
Tu palabra cruel: puede arruinar una vida.
Tu palabra de resentimiento: puede causar odio
Tu palabra brutal: puede herir o matar.
Que mensaje tan cierto q nos dejas ahí amigo, esa es una de las luchas q tengo constante conmigo misma, ya q mi impulsividad y mi sensibilidad exagerada hacen q diga lo q siento sin pensar en mis repercusiones.
ResponderEliminardebido a mis palabras perdí un amigo, y no hay día q no me arrepiente por haber dicho lo q le dije, y haría cualquier cosa por recuperar esa amistad pero ya es demasiado tarde.
bueno a base de cometer errores vamos aprendiendo, pero todo aprendizaje requiere su tiempo.
me gusta tu blog, me ayuda en mi crecimiento personal, y espero algún día llegar a ser la mitad de buena persona q eres tu.
un fuerte abrazo Juan
blanca salgado